sábado, 8 de noviembre de 2008

(noticia Tele5) Conferencia Richard Gage en Fundación Arquitectura Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid

Ayer tuvimos un gran exito de convocatoria en la Conferencia Internacional que Richard Gage representante del colectivo "Architect & Engineers for 911 Truth" expuso en la Fundacion Arquitectura COAM (Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid). Fueron mas de 250 personas (hubo muchos arquitectos e ingenieros) que estuvieron durante casi 3 horas escuchando los innumerables argumentos que se expusieron allí. Desde "La Asociación por la Verdad del 11S" conseguimos que este afamado conferenciante considerara venir a Madrid en su tour Europeo que le lleva a mas de 8 ciudades. Richard nos conto desde el punto de vista Tesis-Antitesis-Hipotesis (pensamiento cientifico) que los edificios que cayeron realmente los DEMOLIERON. Todo como parte de una conspiracion politica al mas alto nivel que no solo ha silenciado a los poderes publicos, tambien a los medios, durante mas de 7 años.

Noticiario de hoy a medio dia Tele 5:



Hubo asistencia de medios, uno de la mainstream como es Tele5 y otra Television local (TeleK de TeleVallecas -Gracias. Hoy un dia posterior a la conferencia hemos podido ver en su canal la noticia tratada con transparencia y rigor puesto que estamos hablando de la prueba cientifica avalada por muchisimos arquitectos, ingenieros y academicos. Tele5 sin lugar a dudas ha considerado que es NOTICIA (ver video) , también la Agencia Reuters/Atlas ha publicado la noticia, ya TeleK de Vallecas publicara una entrevista el martes, no asi todos los demás que a pesar de estar convocados no asistieron a la Conferencia.

Es por tanto necesaria TU COLABORACIÓN para exigir al resto de medios (sobre todo los públicos RTVE) para que de una vez por todas dejen de encubrir semejante asunto que hace que cualquiera que empiece a tener el conocimiento del gran trabajo realizado por ae911truth cambie de saberlo a creérselo porque es CONCIENCIAconCIENCIA.

Asociación por la Verdad sobre el 11S y sus 11S cuadrones por la Verdad

Noticia extraida de Investigar-11S

jueves, 30 de octubre de 2008

El Amero: ¿Un plan subrepticio para el colapso del dólar?

No sé si habréis oído algo sobre la Unión Norteamericana y el Amero. Escuchad lo que dice este tipo. A estas alturas creo que cualquier cosa puede pasar.

Hal Turner muestra el Amero (Subtítulos en castellano):


noticia extraida de http://investigar11s.blogspot.com

viernes, 17 de octubre de 2008

Richard Gage hablara en el COAM de Madrid





Richard Gage, de Arquitects and Engineers for 911 truth viene al Colegio oficial de Arquitectos en Madrid : viernes 7 de noviembre a las 19:00 h. FUNDACIÓN ARQUITECTURA COAM, C/ PIAMONTE Nº 23, MADRID.En ingles con traduccion simultanea. Entrada 5 Euros, llamar 609954536 para reservar.

Bajarte el cartel : http://www.investigar11s.org/poster-acto_7_nov-madrid-AE_EuroFlyer_A4_Full_HR-castellano1-OO.pdf
Leer carta de Richard Gage a Arquitectos e Ingenieros : http://investigar11s.blogspot.com/2008/09/carta-de-richard-gage

Richard Gage entre los yihadistas globales, según la HR1955 y su gobierno

sMAb escribe:

"Lo de la Ley sobre Terrorismo Domestico en EEUU (HR1955) es para poner los pelos de punta.
Leed el articulo para que veais que estan intentando de calificar como Terroristas Jihadistas a un conjunto de mas de 500 Arquitectos e Ingenieros norteamericanos por la Verdad del 11S por ser ACTIVISTAS para aclarar esta GRAN MENTIRA de lo que fueron las demoliciones controladas de los tres edificios mas grandes del WTC de New York hace mas de 7 años.
Menos mal que tienen enfrente a gente muy inteligente y con mucho valor como son los que dirigen las compañias Google, Youtube y este colectivo de arquitectos e ingenieros (por poner un ejemplo) se han negado a quitar mucho material que el Jefe del Comite del Senado, Joseph Lierbeman (senador republicano por Connecticut) ha requerido quitar en favor de la seguridad nacional aplicando la ley HR1955 aprobada el 23 de octubre de 2007, toda una batalla contra y a favor de la libertad de expresión.
El arquitecto Richard Gage y su equipo (presidente del colectivo de Arquitectos e Ingenieros por la Verdad del 911) van a estar en Madrid dando una conferencia en la Fundación Arquitectura COAM, el proximo dia 7 de noviembre de 2008 en una sala de la Fundación Arquitectura COAM (Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid).
Desde la "Asociacion por la Verdad del 11S" queremos darle amplia difusión a este asunto puesto que es algo del mas alto nivel politico puesto que la lucha de fondo mas que de demostrar que las Torres se cayeron (que desde el punto de vista cientifico tecnico es lo que va a demostrar Richard que no ocurrio, es decir que las demolieron), es luchar contra la ley HR1955 por la que cualquier activista que lleve la contraria al gobierno es inmediatamente tachado de Terrorista Jihadista, es decir, luchar por la primera enmienda de la constitucion de los EEUU que es la de tener libertad de expresion y de opinion por encima de todo, ante todo.

Lo destacable de este articulo en relacion con el Sr. Richard Gage es lo siguiente (para ampliar informacion leete el articulo entero que lo encuentras aqui:

"Entre las demandas de quienes testificaron ante el Congreso sobre la "necesidad" de la legislación H.R. 1955 se dijo que cualquier persona que cuestione la explicación oficial del gobierno sobre el 11 de Septiembre está relacionada con un terrorista o algún ayudista material del terrorismo. El portavoz Mark Weitzman del Centro Wiesenthal (irónicamente, fundado por el sobreviviente del holocausto Simon Wiesenthal para educar al público sobre crímenes de guerra), demandó que los arquitectos, ingenieros y científicos que dudan de la narrativa oficial del 11 de Septiembre son iguales a los grupos jihadistas acusados de violentos.

Esto llegó más lejos en una “presentación power point” en que Weitzman mostró el sitio web del arquitecto Richard Gage junto a los sitios acusados de violencia jihadista. Gage ha criticado la historia oficial sobre la destrucción de las torres gemelas y del Edificio Nº 7 del 11 de Septiembre. Basándose en su experticia profesional en edificios de vigas de acero, Gage afirmó que los edificios no pudieron venirse abajo por las razones explicadas por el gobierno y ofrece teorías alternativas apoyadas por la evidencia. Sin importar si uno cree o no en las argumentaciones contrarias sobre los acontecimientos del 11 de Septiembre, no tiene por qué criminalizarse la libertad de expresión y el cuestionamiento de la versión del gobierno."

miércoles, 1 de octubre de 2008

David Ray Griffin habla sobre el engaño del 11-S en Europa

El Catedrático de Teología y Filosofía Prof. David Ray Griffin, autor de varios libros sobre los ataques del 11-S, destaca el papel catalizador que tendría la revelación de la verdad del 11-S a la opinión pública mundial de cara a crear una sociedad mejor, que se concentre en integrarse en equilibrio con el medio natural en lugar de pelearse entre congéneres para monopolizar la explotación del mismo.

Desde esta perspectiva el triste caso del 11-S es una oportunidad para crear algo mejor a partir de las cenizas del presente, y los medios de comunicación de masas deberían perder el miedo a este asunto y asumir el papel que deben desempeñar en una sociedad madura.

Gracias de nuevo a Subtutiles por subtitular el video.


“Arquitectos e Ingenieros Por La Verdad Sobre el 11 de Septiembre del 2001

La organización estadounidense de “Arquitectos e Ingenieros Por La Verdad Sobre el 11 de Septiembre del 2001” http://www.ae911truth.org/ cuenta con el apoyo y la colaboración de más de 400 arquitectos e ingenieros profesionales en la investigación independiente y científica de los derrumbamientos de Las Torres Gemelas y del Edificio WTC7 que tuvieron lugar en aquel día de ya hace siete años. Durante los últimos años, se han presentado cuantiosas pruebas científicas, que ponen en evidencia, que la teoría oficial ofrecida por las autoridades federales estadounidenses, (FEMA y NIST), no explican adecuadamente los colapsos de las tres torres.

Los Arquitectos e Ingenieros Por La Verdad Sobre el 11-S, exigimos una nueva investigación, debidamente financiada, con todo el poder judicial para citar los testimonios de altos cargos, tanto del Gobierno, como de empresas y corporaciones. Presentamos las pruebas en nuestro sitio Web y en directo en salas por todo el país, con la proyección de presentaciones multi-media. La mayor parte de los arquitectos e ingenieros que han presenciado a nuestra presentación multimedia se ha sumado a nosotros en exigir al Congreso una nueva investigación.

Entre las Pruebas más destacadas:

Más de cien funcionarios de rescate, principalmente bomberos, han jurado testimonios de haber escuchado y visto explosiones, dentro de los edificios y en sus sótanos, previas a y durante los derrumbamientos de ambas Torres Gemelas y del WTC7. Estos testimonios fueron grabados en video por el mismo Departamento de Bomberos FDNY de Nueva York inmediatamente después del 11-S en el llamado documento “Oral Histories”. Fue necesario un pleito por parte de la FOIA y el periódico New York Times para poder obligar la desclasificación de este documento audiovisual. También son numerosos los testimonios de destellos de luz de descargas explosivas. Todos los videos del evento revelan que los tres edificios se demolieron de manera explosiva y simétrica. En el caso del WTC7 de 47 plantas, su destrucción fue exactamente la misma que la de cualquier demolición controlada de la historia.

En los sótanos, debajo de los escombros polvorizados de los tres edificios, en lugar de masillos de hierros, acero fundido, en una piscina de magma que ardía durante semanas. Así declara Leslie Robertson, el mismo ingeniero estructural del complejo WTC, y centenares de funcionarios y agentes involucrados en las operaciones de emergencia y rescate. Las muestras de los residuos concluyen que el agente incendiario “Thermite” fue empleado para cortar y fundir columnas y vigas de acero.

Cada colapso produjo inmensas nubes piroclásticas y se ven claramente en las secuencias de los numerosos videos los destellos y explosiones de “squibs” (o explosiones técnicas localizadas en puntos estructurales claves). La Teoría Oficial supone que el efecto dominó causó el colapso sucesivo de las plantas lo cual hubiera quedado en una inmensa pila todavía de gran altura. Sin embargo, todos los restos de los tres edificios prácticamente cupieron en sus propios sótanos. En el caso de Las Torres Gemelas vigas fueron lanzadas a distancias de 400 metros. 90 mil toneladas de hormigón, fachada, pisos, muebles, y mil víctimas mortales fueron polvorizados y hasta fragmentos de huesos humanos aparecieron en los techos de edificios colindantes al WTC.

El edificio WTC7: Lo que más perjudica la versión oficial

• El colapso simétrico, a la velocidad de caída libre, en 6,5 segundos, de un edificio de 47 pisos, no impactado por ningún avión, se derrumbó impecablemente, en un mínimo montón compacto, exhibiendo así todas las características clásicas de una demolición controlada además de ejecución perfecta.
• El "colapso" repentino y espontáneo
• Los numerosos testimonios de explosiones en la planta baja un segundo antes del inicio del colapso.
• El colapso simétrico, por el camino de mayor resistencia, a través de los pisos inferiores, a casi la velocidad de caída libre. (es decir, las columnas no ofrecieron resistencia y tuvieron que haber sido "eliminadas")
• "Colapsos" en su propia huella - con el esqueleto de acero o troceado para el traslado o completamente fundido.
• La provocación de una nube piroclástica masiva
• Toneladas de metal fundido en los sótanos encontradas por los trabajadores de demolición.
• La huella química del agente incendiario “Thermite” (de alta tecnología incendiaria) que se encontraba en todas las muestras de los restos y polvo.
• Muestras de fusión por oxidación inter-granular rápida encontradas incluso por la misma agencia (FEMA) en los restos del acero estructural.
• El conocimiento previo de "colapso" de los primeros en responder, (medios de comunicación, bomberos, policía, etc.).
• La corroboración por parte de profesionales expertos de la demolición controlada.

Se puede revisar todas las pruebas y demás datos en AE911Truth.org. Por favor, observe atentamente las pruebas y considere firmar nuestra petición. Es crucial que lleguemos a ser mil los arquitéctos e ingenieros que exigimos una nueva investigación antes de que sea demasiado tarde.

Atentamente,
Richard Gage, AIA, Arquitecto
Architects and Engineers For 911 Truth
2342 Shattuck Ave., Suite 189 Berkeley, CA 94704
AE911Truth.org outreach@AE911Truth.org


Declaraciones de algunos Arquitectos e Ingenieros…

"AE911Truth expone que un fallo localizado en una construcción de estructura de acero, como el WTC 7, no puede causar un
colapso catastrófico, como un castillo de naipes a la velocidad de caída libre, sin la pérdida simultanea y estratégica de varias de sus más importantes columnas.”
Kamal Obeid, PE, ingeniero estructural
Fremont, CA

"Todos los profesionales nos quedamos asombrados a ver los edificios desintegrarse. Todos pensabamos, aquí pasa algo raro. Richard Gage hace un trabajo excelente en desmentir la explicación oficial desde un punto de vista científico, no partidista. Se trata de "Una verdad incómoda" sobre el 11-S que toda persona debería saber. Prepárense Señores”
Chris Mungenast, AFP
Somerville, MA

"La presentación de AE911Truth.org trae serias dudas a la historia oficial. Es muy difícil comprender cómo los 3 edificios del WTC podrían haber desplomado de la forma en que lo hicieron, únicamente como la consecuencia de 2 aviones y combustible de aviación (kerosena).”
Jeffrey G. Arnold, arquitecto
Orinda, CA.

"AE911Truth.org desafía la versión oficial de un fallo estructural total de las Torres WTC 1 y 2. AE911 demuestra que la caída libre de estas estructuras de acero en su propia huella es una historia sin mérito
y un insulto al sentido común mucho menos al profesional."
Osvaldo Valdés, arquitecto
La ciudad de Nueva York

"WTC7 no fue afectada por las aeronaves, sin embargo, se derrumbó simétricamente a la velocidad de caída libre como hicieron Las Torres Gemelas. El fuego, mucho menos pequeños incendios aislados, no explica esto. Además, los dos informes (FEMA y NIST) no abordan este tema, ni
el metal fundido en el sótano encontrado por los contratistas de demolición y retirada de escombros. ¿Por qué no? ¿Qué pasó? Tengo muy serias dudas como resultado de la presentación del Sr. Gage.”
John Cole, arquitecto
Walnut Creek, CA

"Apoyo absolutamente a AE911Truth.org. Además de las pruebas prima facie de que se presenta de manera profesional, creo que el hecho de que ninguna de las compañías de seguros y/o construcción han exigido ningún cambio en los códigos de los organismos regulatorios demuestra que no hay ninguna verdad detrás de la historia oficial ya que no se adapta ninguna medida preventiva al efecto.”
Keith Burns, arquitecto
Warren Grove, Nueva Jersey

jueves, 25 de septiembre de 2008

El 11-S y la «Inquisición estadounidense»


por Michel Chossudovsky*

«La Guerra Global contra el Terrorismo» actual no es sino una forma moderna de Inquisición. Cuenta con todos los ingredientes esenciales de las Inquisiciones española y francesa. A fin de justificar la agenda militar, se persigue a los «terroristas islámicos» y se despliega una guerra preventiva de ámbito global para «proteger a la Patria».

«La Guerra Global contra el Terrorismo» actual no es sino una forma moderna de Inquisición. Cuenta con todos los ingredientes esenciales de las Inquisiciones española y francesa. A fin de justificar la agenda militar, se persigue a los «terroristas islámicos» y se despliega una guerra preventiva de ámbito global para «proteger a la Patria».

“Se presenta la Guerra Global contra el Terrorismo” (GWOT, en sus siglas en inglés) como “Choque entre Civilizaciones”, una guerra entre valores y religiones en disputa cuando en realidad no es sino una indiscutible guerra de conquista, impulsada por objetivos económicos y estratégicos.

La GWOT es la columna vertebral del Imperio estadounidense. Define la doctrina militar de Estados Unidos e incluye el uso preventivo de armas nucleares contra los “patrocinadores estatales” del terrorismo.

La doctrina de la “guerra defensiva” preventiva y de la “guerra contra el terrorismo” contra Al Qaida constituyen las piedras angulares esenciales de la doctrina militar estadounidense. El objetivo es presentar una “acción militar preventiva”, lo que significa que la guerra es un acto de “autodefensa”, contra dos categoría de enemigos: “los Estados canallas” y los “terroristas islámicos”, de los que se afirma poseen armas de destrucción masiva.

“Como quedó de manifiesto con las pérdidas del 11 de septiembre de 2001, las víctimas civiles masivas se constituyen en el objetivo específico de los terroristas y esas pérdidas serían exponencialmente más graves si los terroristas adquirieran y utilizaran armas de destrucción masiva”. (Estrategia de Seguridad Nacional, Casa Blanca, Washington, 2002)

La Inquisición estadounidense

La “Guerra Global contra el Terrorismo” sirve para justificar que se dedique un presupuesto inmenso a defensa. Necesita “ir a la caza” de los terroristas utilizando sistemas de armamento avanzados. Mantiene una cruzada preventiva de tipo religioso contra el mal que sirve para ocultar los objetivos reales de la acción militar.

La Inquisición estadounidense se utiliza para extender la esfera de influencia de EEUU y para justificar las intervenciones militares como parte de una compaña internacional contra los “terroristas islámicos”. Su objetivo último, que jamás se menciona en las informaciones que la prensa nos ofrece, es la conquista territorial y el control de los recursos estratégicos.

El dogma de la GWOT se enunció y formuló por los think thanks neoconservadores de Washington. Se puso en marcha por el establisment de la inteligencia y del ejército. Y aparece incardinado en los discursos presidenciales:

“Hemos sabido que en este mundo hay gente malvada. Y de qué forma… Y estaremos alerta. Vuestro gobierno está alerta. Los gobernadores y alcaldes están alertas porque la gente malvada sigue aún merodeando por aquí. Como dije ayer, los que le han declarado la guerra a Estados Unidos han cometido un error terrible… Mi administración tiene un trabajo que hacer y lo vamos a hacer. Libraremos al mundo de los malvados”, (George W. Bush, CNN, 16 de septiembre de 2001).

El objeto de la “Guerra Global contra el Terrorismo” lanzada en septiembre de 2001 es galvanizar el apoyo público hacia una campaña de ámbito mundial contra la herejía. Ante la opinión pública, es fundamental contar con una “causa justa” para iniciar la guerra. Se dice que una guerra es justa si se emprende por motivos morales, religiosos o éticos.

La satanización de los musulmanes y la batalla por el petróleo

La guerra que EEUU lidera en la amplia zona centroasiática y medio-oriental tiene como objetivo hacerse con el control de extensas reservas de petróleo y gas natural. Los gigantes del petróleo anglo-estadounidenses buscan también obtener el control de las rutas de oleoductos y gaseoductos que atraviesan la región.

Los países musulmanes poseen entre el 66,2 y el 75,9% del total de las reservas del petróleo, dependiendo de la fuente y la metodología de la estimación. ( Michel Chossudovsky, The “Demonization” of Muslims and the Battle for Oil , Global Research, 4 de enero de 2007). En contraste, los EEUU de América tienen apenas el 2% del total del total de las reservas de petróleo. Iraq tiene cinco veces más petróleo que EEUU.

La satanización se aplica contra un enemigo que posee más del 60% de las reservas mundiales de petróleo. “Eje del mal”, “Estados canallas”, “naciones fallidas”, “terroristas islámicos”: satanizar e infamar son los pilares ideológicos de la Inquisición estadounidense. Sirven como casus belli para emprender la Batalla por el Petróleo.

La Batalla por el Petróleo necesita de la satanización de quienes lo poseen. El enemigo se caracteriza como el mal para poder justificar acciones militares que incluyan el asesinato masivo de civiles. (Ibid)

Los orígenes históricos de la Inquisición

El objetivo es mantener la ilusión de que “EEUU está bajo peligro de ataque” de Al Qaida. Bajo la inquisición estadounidense, Washington se autoproclamó en posesión de un mandato sagrado para extirpar el fundamentalismo islámico y “extender la democracia” por todo el mundo.

La Inquisición estadounidense tiene un armazón ideológico que en algunos aspectos es similar al orden social inquisitorial que prevaleció en Francia y en España durante la Edad Media. La Inquisición empezó en Francia en el siglo XII. Inicialmente adoptó la forma de campaña, en el sur de Francia, dirigida contra los cátaros y valdenses que desafiaban las enseñanzas de la Iglesia Católica Romana.

El movimiento cátaro era una secta religiosa protegida por el orden feudal regional en el sur de Francia en contra del dominio de la Iglesia Católica y la monarquía francesa en París. “Los cátaros creían que ellos eran los verdaderos cristianos y que la Iglesia Católica era una iglesia falsa, fundada por el demonio.”

A comienzos del siglo XIII, el “Papa Inocencio III declaró una cruzada contra los cátaros” a instancias de la familia real francesa. La cruzada fue en realidad una guerra de conquista bajo el disfraz de una campaña contra la herejía.

La Inquisición que se puso en marcha contra la herejía intentaba consolidar el control territorial de la Monarquía. Proporcionó un pretexto para intervenir militarmente en el sur y suroeste de Francia, utilizando como fachada la autoridad de la Iglesia Católica.

La Inquisición se convirtió en parte de un consenso político implementado por los inquisidores de la Iglesia, impuesto por el orden feudal gobernante y apoyado militarmente. Su objetivo era mantener y preservar el orden político y el social, extendiendo los poderes del Estado central, sometiendo a los poderes regionales en Francia, utilizando la campaña contra la herejía como “justificación para emprender la guerra”. ¿Les suena?

El orden inquisitorial actual

Cualquiera que dude acerca de la legitimidad de la inquisición estadounidense (“Guerra Global contra el Terrorismo”) es un teórico de la conspiración herética o un cómplice de los terroristas.

La inquisición estadounidense es parte de un consenso bipartidista. Tanto los demócratas como los republicanos apoyan la inquisición estadounidense.

“Cazar a Osama bin Laden” forma parte de la plataforma electoral de ambos partidos políticos. De hecho es el componente central de la campaña electoral.

Yo [Barack Obama] he defendido la necesidad de enviar más recursos y más tropas para acabar la lucha contra los terroristas que nos atacaron el 11-S, y dejar claro que tenemos que eliminar a Osama bin Laden y a sus lugartenientes si se ponen a nuestro alcance (Barack Obama, discurso de aceptación de su candidatura, Convención Demócrata Nacional, Denver, agosto de 2008).

En los últimos años hemos asestado a Al Qaida un golpe serio. Pero no están derrotados y lucharán de nuevo contra nosotros si pueden. (John McCain, discurso de aceptación de su candidatura, Convención Nacional Republicana, St. Paul, septiembre 2008).

Hay un “enemigo exterior”. La Patria está bajo amenaza de ataque. Los terroristas islámicos “amenazan nuestra forma de vida”. “Debemos defendernos” preventivamente contra Osama bin Laden y sus lugartenientes.

El Mando del Norte de EEUU (Northcom), que tiene sus cuarteles en la base de la fuerza aérea en Petersen, Colorado, se estableció a principios de 2002 para proteger a EEUU contra un ataque terrorista. Se presentó ante la opinión pública como una respuesta a los ataques del 11-S. Los objetivos estratégicos reales del Mando del Norte ni se mencionaron, que utiliza además armas de defensa aéreas sofisticadas que incluyen cabezas de guerra nucleares.

Consenso político

Los portavoces del orden inquisitorial estadounidense son los medios corporativos occidentales.

Se consideran cómplices de los que amenazan a la patria estadounidense a todos aquellos que cuestionen la validez de cualquiera de esas afirmaciones o que tengan dudas sobre quién está detrás de los ataques del 11-S.

En 1232, el Papa Gregorio IX estableció un sistema de tribunales religiosos especiales que se denominaron Inquisición. Se envió a los frailes dominicos para que localizaran e interrogaran a los heréticos:

“La herejía no podrá destruirse a menos que sean destruidos los heréticos… y sus defensores y [seguidores] sean también destruidos, y esto se efectuó de dos formas:… o se convertían a la verdadera fe católica o… morían en la hoguera. (Henry Charles Lea, “ A History of the Inquisition in the Middle Ages ” , pág. 535, 1887)

Aquellos que rechazaban retractarse, que no renunciaban a su herejía, eran quemados vivos.

El Acta Patriótica actual, los tribunales militares, el campo de concentración de Guantánamo, los campos de “entregas” de la CIA, Abu Ghraib, etc., forman parte de un sistema inquisitorial avanzado. Se mantiene incomunicados a los sospechosos de terrorismo. Ni siquiera se les concede el derecho a retractarse.

El objetivo no es hacer del mundo un lugar más seguro poniendo tras las rejas a los terroristas. La agenda oculta es mantener la ilusión de que los “terroristas islámicos” constituyen una amenaza real. El objetivo es convencer a la opinión pública de que el enemigo es real.

Fabricando disentimiento

Washington no silencia a sus críticos antibelicistas. Muy al contrario. El orden social inquisitorial permite ciertas formas de desacuerdo. Es políticamente correcto que bajo una “democracia” se condene la política exterior estadounidense en los términos más firmes.

Lo que no se permite es que se cuestione la Inquisición.

Aquellos que se oponen a la administración estadounidense no son necesariamente etiquetados como herejes. Muchos activistas “progresistas”, liberales y antibelicistas, dirigidos por intelectuales importantes, creen firmemente que los musulmanes estaban tras los ataques del 11-S. “Estamos contra la guerra, pero apoyamos la guerra contra el terrorismo”.

El Nuevo Orden Mundial construye un consensus político y de los medios de comunicación ( i.e . la GWOT) pero al mismo tiempo crea y moldea su propia oposición. Establece los límites del disentimiento. “Fabrica disentimiento”.

Los candidatos presidenciales de la carrera bipartidista están apoyados por poderosos intereses corporativos entre los que se encuentran las compañías petrolíferas, Wall Street y los contratistas del sector de la defensa.

El 11-S es la piedra angular de la Inquisición estadounidense.

Las mentiras que subyacen tras el 11-S son aceptadas por el movimiento antibelicista dominante.

Se condena la política exterior de EEUU, pero se apoya la “Guerra Global contra el Terrorismo”. A sabiendas o no, ese refrendo de la GWOT por quienes proclaman que se oponen a la administración estadounidense, proporciona legitimidad al orden inquisitorial que subyace bajo las prácticas actuales de la política exterior de EEUU.

Por otra parte, aquellos que tienen serias dudas acerca de la narrativa oficial alrededor del 11-S, incluido el Movimiento por la Verdad del 11-S, son tachados de herejes y no creyentes.

La teoría de la “Guerra Justa”

La teoría de la “Guerra Justa” ( justum bellum) tiene una muy larga tradición. Se ha venido utilizando a través de la historia para apuntalar el orden social dominante y proporciona justificación para emprender la guerra.

En el caso de Afganistán, el 11-S jugó un papel esencial a la hora de justificar la invasión. Se consideró que la guerra contra Afganistán era una “Guerra Justa”, emprendida por razones humanitarias.

El 12 de septiembre de 2001, la OTAN invocó, por primera vez en su historia, el “Artículo 5 del Tratado de Washington, la cláusula de defensa colectiva”, declarando que los ataques del 11-S contra el World Trade Center y el Pentágono “representaban un ataque contra todos los miembros de la OTAN”.

Y fue a Afganistán a quien le tocó la china , sin una sola prueba y antes de llevar a cabo ni una sola investigación, de ser el “estado patrocinador” de los ataques del 11-S. La invasión de Afganistán a principios de octubre de 2001 se presentó como una operación de contraterrorismo dirigida contra los autores del 11-S y sus estados patrocinadores.

Sindicatos, ONG y muchos intelectuales “progresistas” refrendaron la invasión dirigida por EEUU-OTAN. Los sucesos del 11-S jugaron un papel esencial para conseguir los apoyos de diversos sectores de la sociedad estadounidense, incluyendo a opositores y críticos de la política exterior de la administración Bush.

La guerra contra Afganistán se había venido preparando mucho antes del 11-S. Los preparativos de guerra estaban ya en un estadio avanzado de gestación. EEUU y la OTAN dieron luz verde para emprender la guerra contra Afganistán dentro de las veinticuatro horas posteriores a los ataques del 11-S.

Los informes de la prensa no revelaron un hecho que se conoce ahora y que los analistas militares reconocen: un escenario importante de guerra no puede, en circunstancia alguna, planificarse ni desarrollarse hasta después de cuatro o cinco semanas.

El 11-S se utilizó como justificación para emprender una “guerra humanitaria”. La guerra contra Afganistán estaba planeada mucho antes de los trágicos sucesos del 11 de septiembre de 2001 y los analistas militares conocen bien ese hecho.

La Inquisición española

Durante los siglos XIV y XV, la Inquisición se extendió a otras partes de Europa. En Italia, la Inquisición iba tras los movimientos nacionalistas en regiones como Lombardía, en el norte, Venecia o Sicilia. Se utilizó para suprimir esos movimientos políticos. En el norte de Francia y de Alemania, la Inquisición utilizó el pretexto de pequeñas sectas de carácter místico para intervenir política y militarmente. Los poderes regionales, incluyendo los principados locales, rechazaron cooperar con la Inquisición. En el mundo actual, esa forma de intervencionismo se lleva a cabo enviando fuerzas especiales estadounidenses en “ayuda de los gobiernos” para que combatan el terrorismo.

España, conquistada por los musulmanes y reconquistada en parte por los cristianos en el siglo XIII, era “religiosamente heterogénea y había desarrollado una tolerancia para que musulmanes, cristianos y judíos pudieran vivir juntos en relativa paz”. Hacia finales del siglo XV, coincidiendo con un período de consolidación política y territorial, “la tolerancia española cambió abruptamente. España vio cómo surgía una forma de inquisición más despiadada y perjudicial que en ningún otro lugar de Europa”. (Bill of Rights in Action) .

La Inquisición española se caracterizó también por un proceso de construcción de consenso y de persecución de heréticos y no creyentes. La Inquisición se utilizó para apoyar el proceso de consolidación territorial en la Península Ibérica. El objetivo era reforzar la monarquía absoluta y los poderes de la aristocracia terrateniente contra las clases conformadas por los comerciantes judíos y musulmanes.

La Inquisición española se creó a instancias de la Reina Católica Isabel. En 1483, los Reyes Católicos, Isabel de Castilla y Fernando de Aragón, establecieron un consejo destinado a dirigir la inquisición. Tomás de Torquemada, consejero de la Reina Isabel, se convirtió en el primer Inquisidor General. Torquemada había predicado anteriormente contra los conversos musulmanes y judíos. El objetivo era reprimir a las clases comerciantes que estaban surgiendo. “Un país, un gobernante, una fe” , se convirtió en el mandato del Inquisidor General.

El Papa apoyó a la Inquisición, la agenda oculta era el mantenimiento del orden feudal y las guerras coloniales emprendidas por España. La Inquisición española duró unos 300 años.

En actualmente, en EEUU, el General Inquisidor es la Secretaría del Departamento de Seguridad Interior.

El aparato legal

La Inquisición en la Edad Media se dedicaba a recoger acusaciones:

“ Si dos testigos bajo juramento acusan a alguien de herejía, la persona acusada sería mandada llamar; opiniones, prejuicios, rumores y cotilleos, todo se aceptaba como prueba. Al acusado jamás se le decían los nombres de los acusadores, ni siquiera sabía exactamente de qué le acusaban.

Los inquisidores examinaban al acusado en secreto. Cualquiera que se negara a confesar de inmediato asumía que era culpable. Los inquisidores tan sólo estaban cualificados en religión, e intentaban atrapar al acusado con preguntas religiosas. Por ejemplo, un inquisidor podía preguntar: “¿Crees en lo que la sagrada iglesia cree?”

“Soy un fervoroso cristiano”, podía responder aterrado el sospechoso.

“ ¡Esto es!”, podía gritar el inquisidor. “¡Ya sabemos que crees en herejías! ¡Estás diciendo que tus creencias son el verdadero cristianismo y que la iglesia es falsa!” ( Bill of Rights in Action )

No se permitían abogados porque se consideraba herejía defender a un herético:

“Torturarían a quienes se negaban a retractase. Durante la tortura, los inquisidores religiosos actuarían como testigos para recoger confesiones o anotar los nombres de otros herejes. El gobierno también cumplía la sentencia final de encarcelamiento o muerte.

Aquellos que se retractaban inmediatamente podían recibir una sentencia bastante leve, rezar plegarias, ayunar, ser azotados en público o hacer una peregrinación. Algunos de los que se retractaban eran obligados a llevar una cruz amarilla de fieltro cosida en todas sus ropas. La cruz les marcaba como anterior herético y mucha gente se apartaba de ellos con temor.

Muchos de los que se negaban a abjurar enseguida eran sentenciados a prisión perpetua. Si se negaban en redondo a abjurar, la Inquisición les devolvía a las autoridades del gobierno para que les quemaran vivos. Algunos inquisidores eran tan rigurosos que les perseguían hasta a los muertos. Si una persona muerta era acusada de herejía, desenterraban los huesos y los quemaban.

Para la mayoría de los acusados de herejía, no había apelación posible. Los que poseían alguna riqueza o poder podían presentar una súplica ante el Papa para que cambiara la sentencia pero, para la mayoría de los condenados, la sentencia era definitiva. Las familias de los enviados a prisión o a la hoguera perdían sus propiedades”.

( Bill of Rights in Action , véase History of the Inquisition ).

Actualmente, el sistema legal de EEUU tiene todos los rasgos fundamentales de un orden inquisitorial. Se permite la tortura “en determinadas circunstancias”, según una “opinión legal” del Departamento de Justicia de agosto de 2002.

“Si un empleado del gobierno torturara a un sospechoso cautivo, ‘lo haría para impedir nuevos ataques contra los Estados Unidos por parte de la red terrorista de Al Qaida’, decía el memorandum de la asesoría legal del Departamento de Justicia redactado en respuesta una petición de la CIA solicitando orientación legal. Añadía que los debates se centraban en que la “necesidad y autodefensa podían proporcionar justificaciones que eliminarían cualquier responsabilidad criminal” posterior. (Véase el Washington Post del 7 de junio de 2004).

“Incluso aunque un método de interrogatorio sobrepasara la línea establecida en la Sección, la aplicación de la medida no supondría que la autoridad del Comandante en Jefe del Presidente infringía la Constitución; creemos que bajo las circunstancias actuales [la guerra contra el terrorismo], se podrían alegar ciertas justificaciones en virtud de la defensa que potencialmente eliminarían la responsabilidad criminal”. (Pdf con el Memorandum completo del Departamento de Justicia del 2 de agosto de 2002)

La tortura

“La Inquisición española fue especialmente aterradora debido a sus inherentes características. Los acusados nunca sabían quiénes eran sus acusadores. Una vez arrestados, perdían todas sus propiedades”.

“Esas propiedades eran entonces administradas, en primer lugar, por la Corona, y posteriormente por la Inquisidor General…

Incluso si el acusado se convertía en un devoto cristiano, era tratado tan severamente como fuera posible debido a sus antecedentes. No se permitía que el acusado dispusiera de abogado o asesoramiento para su defensa, y se mantenían en secreto los nombres de todos los testigos”. (Jason L. Slade, The Spanish Inquisition, 6 de agosto de 1996).

La tortura estaba al orden del día. Al acusado no se le permitía tener abogado.

Los métodos de tortura utilizados en la Edad Media, incluido el tormento del agua, presenta un peculiar parecido con las técnicas de tortura aplicados por los inquisidores actuales de la CIA:

“Debido a que los juicios eran sobre asuntos espirituales, era la Iglesia la que llevaba el control de aquéllos. Sin embargo, los castigos eran normalmente muy físicos, por lo que eran ejecutados por el estado. Había muchas modalidades de torturas físicas para lograr las confesiones. Las dos más famosas o infames eran el strappado o la polea, y el aselli o tormento del agua (Jason L. Slade, The Spanish Inquisition, 6 de agosto de 1996).

Los informes de Alfred Mc Coy a ese respecto exponen que la CIA:

“había añadido a menudo a su repertorio de métodos sin tocar al interrogado métodos físicos que eran reminiscencias de las torturas propias de la Inquisición: el strappado, el método del agua, la “cigüeña invalidante” y las “máscaras de burla”. Por ejemplo, en 2002, en el centro de la CIA situado cerca de Kabul, los interrogadores estadounidenses obligaban a los prisioneros a “permanecer quietos con las manos encadenadas colgando del techo y los pies con grilletes”, provocando un efecto similar al strappado. En lugar de la “cigüeña invalidante”, un armazón de hierro de la Inquisición para hacer que el cuerpo de la víctima se retorciera, los interrogadores del a CIA hacían que sus víctimas asumieran “posiciones de estrés” parecidas sin mecanismos externos, de nuevo con el objetivo de lograr el efecto psicológico del dolor autoinducido… ( Alfred Mccoy, The Hidden HIstory of CIA Torture : America’s Road to Abu Ghraib , Global Research, diciembre 2004). (Traducción al español en: http://www.desdeabajo.info/articulos_en_pdf.php?id=281)

En España, en el siglo XVI, se aceptaba la Inquisición. Había consenso. Se había hecho creer a la población que era algo bueno, que la tortura “servía para purificar la sociedad”.

“Un obispo aparecía y gritaba los nombres de los condenados. Después se sacaba a los condenados, que vestían ropajes negros decorados con demonios rojos y llamas. Los funcionarios del gobierno les ataban a la estaca”.

“¿Renuncias a tu herejía contra la sagrada iglesia?”, le preguntaría un sacerdote.

Si alguien se arrepentía, se le estrangulaba antes de quemarle. La mayoría, sin embargo, permanecía en silencio o en actitud de desafío. Se prendía la hoguera y la plaza se llenaba con los gritos de los herejes y los vítores de la multitud” (citado en Bill of Rights in Action, op cit).

Cualquiera que se atreviera a cuestionar la validez de esa “guerra contra el terrorismo” era tachado de terrorista y sometido a las leyes anti-terroristas que, en aquella época en España, suponían la muerte.

En el entorno inquisitorial actual, muchas personas se sienten escépticas sobre el 11-S pero nadie se atreve a cuestionar la validez de la guerra contra el terrorismo.

“Esos son mala gente y los perseguiremos y los eliminaremos”. El discurso es casi el mismo.

El objetivo último es someter a los ciudadanos, despolitizar totalmente la vida social en EEUU, impedir que la gente piense y pueda elaborar conceptos, que analice los hechos y desafíe la legitimidad del orden social inquisitorial que gobierna en EEUU.

La Gran Mentira se convierte en la Verdad. El objetivo es en último extremo transformar las realidades, ponerlo todo al revés.

La guerra aparece como paz, como una misión humanitaria que merece la pena, y el desacuerdo pacífico se convierte en herejía.

El objetivo es crear una atmósfera de temor e inseguridad para poder implantar el Nuevo Orden Mundial.

En palabras de Monthy Phyton:

¡NADIE se espera la Inquisición española!

Nuestra principal arma es la sorpresa… la sorpresa y el temor… el temor y la sorpresa…

Nuestras dos armas son el temor y la sorpresa… y la eficacia implacable…

Nuestras *tres* armas son el temor, la sorpresa y la eficacia implacable… y una devoción casi fanática hacia el Papa…

Nuestras *cuatro*… no… *Entre* nuestras armas… Entre nuestro armamento… hay elementos como el temor, la sorpresa…

Empezaré de nuevo. (Monthy Phyton, La Inquisición Española)

¿Cómo revertir la corriente?

Socavar la Inquisición;

Revelar las mentiras tras el 11-S;

Romper el consenso;

Revelar los crímenes cometidos por los ocupantes de los altos despachos;

Derribar a los inquisidores:

“Millones de seres han sido engañados acerca de las causas y consecuencias del 11-S.

Por todo lo ancho y largo, la imagen de un “enemigo exterior” se ha ido instilando en la conciencia de los estadounidenses. Al Qaida amenaza a EEUU y al mundo. La revocación de la democracia bajo la legislación del Acta Patriótica es presentada como un medio que proporciona “seguridad interior” y mantiene las libertades civiles.

Cuando el pueblo de EEUU y de todo el planeta averigüe que Al Qaida no es un enemigo exterior sino una creación de la política exterior estadounidense y de la CIA, la legitimidad de la agenda bélica bipartidista se derrumbará como una baraja de cartas…” ( Michel Chossudovsky, “America’s War on Terrorism” , Global Research 2005).

Enlace con texto original:
http://www.globalresearch.ca/index.php?context=va&aid=10144


11-S : dudas sobre la historia oficial

Por fin. El periódico Diagonal, se supone de los más "alternativos", publica ALGO sobre los autoatentados del 11 de Sept. del 2001. Ya todos aquellos, de "izquierdas", con demasiado verguenza o miedo a la realidad que supera la ficción, ya podéis creer lo que sabes, ya que vuestra "voz oficial" lo permite

SIETE AÑOS DESPUÉS DE LOS ATENTADOS EN LAS TORRES GEMELAS Y EL PENTÁGONO, PERSISTEN LOS PUNTOS OSCUROS

11-S : dudas sobre la historia oficial

Fernando Berrendero / Madrid


Desde los atentados del 11 de septiembre de 2001, numerosos indicios, pruebas y hechos comprobados ponen en duda la versión oficial que dio el Gobierno de Bush sobre lo que sucedió aquel día.

Según relata el veterano periodista y corresponsal de guerra Robert Fisk en un artículo en The Independent de septiembre de 2007, siempre que da una charla alguien pregunta : “¿Por qué siendo un periodista libre no dice la verdad del 11-S ?”. Fisk, a pesar de dejar claro que no cree en conspiraciones y “locas investigaciones (...) a cuya lectura cualquier hombre sano debería preferir la de la guía telefónica”, reconoce que se encuentra cada vez más desconcertado con la versión oficial de lo que ocurrió el 11 de septiembre : “¿Dónde están las partes de las aeronaves del ataque al Pentágono ? (...) ¿Por qué los restos del vuelo 93 [el que se estrelló en Pensilvania] se esparcieron por un radio de kilómetros, cuando se supone que se estrelló entero en un campo ? (...) ¿Qué pasó con la tercera torre, el llamado World Trade Center Building 7, que colapsó por sí misma en 6,6 segundos a las 17.20h del 11 de septiembre ?...”. Robert Fisk, al igual que numerosos periodistas y medios de comunicación, se ha preocupado por estas y otras cuestiones desde el mismo día de los atentados. Recogemos algunas de las principales líneas de investigación que ponen en entredicho la historia oficial de los atentados.

La preparación

La magnitud del atentado señaló al multimillonario saudí, antiguo colaborador de la CIA en Afganistán, Osama Bin Laden, por ser el único con suficientes recursos para planear y ejecutar un ataque de esas dimensiones. Sin embargo, las primeras dudas sobre la autoría aparecen el mismo 11 de septiembre. Siete años de investigación han arrojado más interrogantes. Empezando por el propio FBI : según informa en su página web, Bin Laden es buscado por su implicación en los atentados que tuvieron lugar en 1998 contra las embajadas de EE UU en Kenia y Tanzania, y en 2000 contra el destructor USS Cole frente a las costas de Yemen, pero no por los atentados del 11-S. Por otra parte, analistas de todo el mundo, como el periodista Alex Jones o el senador demócrata Dennis Kucinich, han puesto en duda que el atentado terrorista más complejo cometido dentro de EE UU, que involucraba el secuestro de cuatro aviones, que partían desde tres aeropuertos diferentes, pudiese ser planeado y organizado desde una cueva en las montañas de Afganistán.

Otro de los elementos que suscitaron dudas desde el principio fue la aparición de pruebas prefabricadas. Tras la nube de fuego y polvo que hundió las Torres Gemelas, apareció intacto el pasaporte del jefe de los secuestradores, Mohammed Atta, según publicó The Guardian el 19 de marzo de 2002. Sin embargo, las cajas negras de los aviones, diseñadas para aguantar accidentes aéreos, quedaron prácticamente inservibles. Igualmente, en el aeropuerto de Boston se encontró un coche alquilado a su nombre, dentro del cual había una guía para pilotos en árabe y un Corán, según se informaba en el mismo artículo del periódico británico.

Un topo entre los secuestradores

Según el informe oficial de la Comisión de Investigación del 11-S, preparar un atentado como éste llevaría unos dos años. La oposición demócrata criticó que durante todo ese tiempo, el FBI no fuera capaz de detectar una red terrorista formada por al menos 20 personas. Y todo eso a pesar de que un compañero de piso de dos de los secuestradores –Khalid Almihdhar y Nawaf Alhazmi– era un topo que había trabajado estrechamente con la oficina del FBI de San Diego, según publicó Newsweek Magazine en septiembre de 2002.

John O’Neill, uno de los mayores expertos en antiterrorismo del FBI, dimitió de su cargo de director adjunto del FBI a finales de agosto de 2001. O’neill dijo a los periodistas Jean-Charles Brisard y Guillaume Dasquie que “el principal obstáculo para investigar el terrorismo islamista son los intereses petroleros de Estados Unidos”, cita que aparece reflejada en la página del Partido Demócrata estadounidense. O’Neill había investigado el primer atentado contra las Torres Gemelas, en 1993, así como otros ataques perpetrados por grupos yihadistas. No obstante, renunció a su cargo, cansado de las interferencias en su trabajo, según la misma investigación. Tuvo la mala suerte de ser contratado como jefe de seguridad del World Trade Center, siendo su primer día de trabajo el 10 de septiembre de 2001. Murió en los ataques del día siguiente, según difundió la CNN.

Tras el atentado contra las Torres de febrero de 1993 el papel del FBI fue fuertemente criticado : durante el juicio se reveló que uno de los implicados, Emad Ali Salem, trabajaba a las órdenes de un agente especial del FBI, John Anticev. El 29 de septiembre de ese año, cuando casi finalizaba el juicio, el informante del FBI, Salem, presentó ante el tribunal horas de conversaciones telefónicas grabadas con agentes de dicho organismo de seguridad. Los diálogos del FBI y su informante fueron publicados por The New York Times, The Washington Post y The Daily News, y empañaron el trabajo de investigación de los agentes federales sobre el atentado. “Si hubiéramos seguido haciendo nuestro trabajo, esa bomba no habría explotado jamás. Es verdad, nos equivocamos”, decía la voz del agente John Anticev en la cinta. Salem declaró ante el tribunal : “En determinado momento, el FBI pensó en sustituir los explosivos por un polvo inocuo, pero el plan fue anulado”.

El papel de la CIA

Se ha informado a menudo de que Bin Laden padece una insuficiencia renal, por lo que tiene que recibir tratamientos de diálisis. Según informaron los diarios The Guardian y Le Figaro, citando fuentes del espionaje francés, Bin Laden recibió tratamiento en un hospital militar estadounidense en Dubai, en julio de 2001. Durante su estancia, fue visitado por familiares, altos cargos del espionaje saudí, y por el jefe local de la CIA, según estos medios. Por esas épocas, Bin Laden ya era el terrorista más buscado por el FBI, por su implicación en los atentados contra las embajadas de Kenia y Tanzania y el destructor de la marina estadounidense USS Cole.

Por otra parte, los servicios secretos pakistaníes (ISI) son conocidos por su estrecha relación con la CIA desde la invasión de Afganistán por parte de la URSS. El periódico The Wall Street Journal y The Guardian informaron el 22 de julio de 2004 que el jefe del ISI, Mahmoud Ahmed, hizo una transferencia a Mohammed Atta, el supuesto líder de los secuestradores del 11-S, por valor de 100.000 dólares poco antes de los ataques. El mismo 11 de septiembre, Ahmed se encontraba de hecho en Washington, donde se reunió con el entonces director de la CIA, George Tenet y con Marc Grossman, el subsecretario de Estado de Asunto Políticos, según el mismo artículo.

Según publicó el periódico israelí Haaretz en su edición del 26 de septiembre de 2001, la empresa de servicios de mensajería instantánea Odigo informó que dos empleados suyos recibieron sendos avisos sobre el atentado dos horas antes de que éste se produjera. Odigo tenía su sede en la ciudad israelí de Herzliya, si bien la oficina de Nueva York se encontraba en el complejo World Trade Center. Junto a estos dos empleados de Odigo, Willie Brown, alcalde de San Francisco, afirmó haber sido advertido de que no volara el día 11 de septiembre, según publicó el periódico San Francisco Chronicle un día después de los ataques.


EL ARTE DEL ‘CASUS BELLI’

1898 - ACORAZADO MAINE. _La explosión del acorazado estadounidense Maine frente al puerto de La Habana desencadenó la guerra entre España y EE UU, a pesar de las evidencias presentadas que apuntaban a una explosión interna.

1915 - LUSITANIA.
El hundimiento de este barco alentó la entrada de EE UU en la I Guerra Mundial. Antes de partir de Nueva York, la embajada alemana publicó anuncios en periódicos, advirtiendo de que el trasatlántico navegaría por zona de guerra, lo que le hacía susceptible de ser hundido. El Lusitania se dirigió a una zona en la que se sabía que operaban submarinos alemanes.

1941 - PEARL HARBOUR.
El ataque japonés a la base de EE UU provocó su entrada en la II Guerra Mundial. Antes del ataque, en palabras del ministro de la Guerra, Henry Stimson, la cuestión era cómo conseguir que “los japoneses hicieran el primer disparo”. Antes del ataque, el 83% de los estadounidenses estaba en contra de involucrarse en la guerra. Después del ataque, un millón de hombres se alistaron voluntarios.

1962 - LA OPERACIÓN NORTHWOODS.
Ésta fue planeada en el marco de la Operación Mangosta, para proporcionar al Gobierno de EE UU apoyos para una invasión a Cuba. La Operación Northwoods consistiría, entre otras medidas, en el lanzamiento de ataques a fuerzas estadounidenses, junto con una campaña de atentados terroristas en República Dominicana, Haití, o incluso en Estados Unidos, perpetrados por oficiales de los servicios secretos y el Ejército estadounidense con uniformes del Ejército cubano.

1964 - EL INCIDENTE EN EL GOLFO DE TONKIN.
Fue el desencadenante de la intervención masiva por parte de EE UU en Vietnam. Según se informó, barcos estadounidenses fueron atacados por torpederos norvietnamitas el 2 y el 4 de agosto de 1964, lo que llevó al Congreso de EE UU a autorizar al presidente Johnson a intervenir en cualquier país del sureste asiático para contener el comunismo. Sólo hay un problema : el ataque nunca se produjo. Según se reveló en 2005 NSA, el 2 de agosto fue el barco estadounidense el primero en abrir fuego, mientras que el 4 de agosto no había ningún barco vietnamita en la zona.

2008 - IRÁN.
A finales de julio, según reveló el periodista estadounidense Seymour Hersh, la oficina del vicepresidente Cheney planeaba construir barcos similares a los torpederos iraníes para perpetrar ataques contra barcos o instalaciones estadounidenses, y de este modo tener una excusa para atacar Irán.


http://diagonalperiodico.net/spip.php?article6401

sábado, 9 de agosto de 2008

11M, muchos queremos saber, otros no quieren que sepamos.

Permalink 09.08.08 @ 10:28:19. Archivado en 11M, sabremos quien fue.

Zapatero dijo en la comisión del Congreso sobre el 11M que ya se sabía todo, después nos aseguraron que la sentencia de la Audiencia Nacional era el carpetazo definitivo del 11M y que se sabía todo. Con la sentencia del Tribunal Supremo aprovecharon los que ya habían dado carpetazo al asunto tantas veces con anterioridad para volver a dar carpetazo al macro atentado y a decirnos que se sabía todo. Tantos carpetazos y tanto conocimiento absoluto parece que no convencen a los españoles que opinan casi masivamente que no se sabe todo lo que ocurrió en aquel atentado y dicen que quieren saber qué pasó.

Es lo malo que tienen los carpetazos tipo “ya se sabe todo y vale ya”, que cuando se carpetiza contra la lógica de los hechos, incluida la lógica judicial la gente se mosquea cada vez más y es bueno que los carpetizadores sean tan burdos en sus argumentos porque así evitan que a nivel popular se dé el carpetazo por el que tanto mienten diciendo que ya todo se sabe.

Es curioso que la mentira en este país se pague no ya barata sino a precio cero. Aquí la sentencia dice que el explosivo provino todo o en parte de Mina Conchita y se dice que se sabe todo. Se dice que los mal suicidados de Leganés no pueden ser declarados los autores porque no hay pruebas de ello, y se insiste en que se sabe todo. Se queda la teoría oficial de los de la conspiración anticonspiranóica sin autores intelectuales, sin promotores, sin financiadores, sin planificadores e insisten en que se sabe todo. Jamás en la historia de este país se supo todo de un atentado sabiendo menos.

Por poner un ejemplo tonto. Si la sentencia inicial de la Audiencia dice que el arma del crimen podría no proceder toda ella de Mina Conchita, podemos afirmar que una parte de los asesinados lo fue con un explosivo del que se desconoce su origen y quienes se lo dieron a los asesinos. Pero nadie, que se sepa, está investigando si hay otros responsables de la masacre al nivel de Trashorras y quienes son. El tribunal sentenciador nos dice que en ese aspecto no se sabe todo, pero nos quieren endilgar el gato “todo se sabe” por la liebre “mucho no se sabe”.

Hoy el diario El Mundo da los datos de una encuesta que revela que un 76,5% de los españoles creen que no se conoce toda la verdad sobre el 11M. Los enterradores de la verdad entierran pésimamente y eso es al menos un consuelo. También dejan claro que solo algunos medios de información han puesto interés en descubrir la verdad, por encima del puesto por las fuerzas de seguridad.

Yo además de gritar que quiero saber la verdad sobre el 11M ahora exijo saber quienes no quieren que sepamos la verdad del 11M y porqué. Todos estos enterradores que figurarán antes o después en el ranking de la infamia y de la ignominia nacional que sepan que les va a costar mucho convencer a todos de que hay que aceptar el no saber la verdad porque la verdad puede ser muy mala, pero para quienes quieren taparla.

Esta no es que sea una verdad incómoda, es una verdad letal para muchos y solo teniendo eso claro se puede llegar a entender el porqué hacen tantos esfuerzos y atentados contra la lógica más elemental para enterrarla. El aforismo aquel de que “la verdad nos hará libres” no es del todo cierto en este caso, a nosotros puede hacernos más libres, pero a otros les hará menos libres entre rejas.

Documentación.

http://www.elmundo.es/elmundo/2008/08/09/espana/1218254316.html?a=3e15e2516abadcbe4abe82fac66c6651&t=1218265536

El Mundo. Tres de cada cuatro españoles afirman que aún no se conoce toda la verdad del 11-M

miércoles, 6 de agosto de 2008

Operaciones de Bandera Falsa


Documental de la TV alemana sobre las operaciones encubiertas y acciones terroristas de las que se valen algunos gobiernos para culpar a otros por supuestos hechos que les sirven de pretexto para realizar acciones que en condiciones normales no harían. Desde la Segunda Guerra Mundial y Pearl Harbor, pasando por la lucha contra el Comunismo contra Cuba y Vietnam, América Latina y la misma Europa, el Medio Oriente pero sobre todo los mismos Estados Unidos y los ataques al Pentágono y las Torres Gemelas en 2001 o los atentados en Londres y Madrid en 2005.

sábado, 12 de julio de 2008

Terrorstorm (TerrorStorm: A History of Government-Sponsored Terrorism)

SINOPSIS: A lo largo de la historia han existido gobernantes que han utilizado ataques terroristas contra su población con el fin de esclavizarla. 'TerrorStorm' revela como, en los últimos cien años, líderes occidentales han asesinado repetidamente a sus propios ciudadanos haciéndose pasar por sus salvadores.











Al-Hamama, un documental sobre el 11M

En Al-Hamama no hay conclusiones, pero la mirada que se propone sobre el tema
es más elocuente que cualquier informe oficial.
Carlos Losilla


El próximo sábado 11 de marzo se cumplen dos años de los atentados de Madrid. Con motivo de esta fecha y aprovechando también la reciente creación de la web, queremos darles a conocer el documental Al-Hamama, realizado en el marco de la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona.

Al-Hamama es un documental de media hora que nace a iniciativa de Zouhair El-Hairan. Zouhair es un joven marroquí, concretamente de Tetuán, que se desplaza a Barcelona ahora hace ya más de 4 años para estudiar Comunicación Audiovisual. Durante este período se produce el 11-M y, casi un mes después, explota en Leganés un piso con los presuntos autores materiales del atentado dentro. Al revelarse las identidades de los fallecidos, todo apunta ya de forma clara al Islam, y centra la atención en Marruecos, como lugar de origen de los mismos. Concretamente, varios de los integrantes de la denominada por los medios como “célula de Leganés” son también de Tetuán, como Zouhair, muchos de ellos además muy jóvenes. Con la conmoción que todos estos acontecimientos provocan en él, Zouhair decide iniciar un regreso a su ciudad natal, a conocer de primera mano los lugares donde pudieron vivir estas personas, vecinas suyas, y a tratar de encontrar respuesta a muchas de las preguntas que los acontecimientos le planteaban. ¿Cuál es la verdadera relación entre los atentados y el Islam? ¿Cuál era la motivación de los presuntos autores? ¿Por qué eran muchos de ellos marroquís y había en particular tantos de Tetuán? La negativa imagen que se tiene del “moro” en España y el desconocimiento que de esta cultura se tiene desde este lado del Estrecho y del Islam en general eran otras de las motivaciones que movieron a Zouhair.

El resultado en Al-Hamama es un diálogo con la cotidianidad para tratar de establecer reflexiones alternativas a la visión simplista y en muchos casos manipulada que sobre este tema hacen la mayoría de medios de comunicación. Cuando están a punto de cumplirse 2 años de los atentados del 11-M, que dejaron la inolvidable cifra de 200 muertos y cientos de heridos, todo sigue apuntando al Islam de forma simplista a pesar de la poca claridad que hay sobre lo ocurrido. La hegemonía estadounidense en este tema sigue apuntando cada vez con más fuerza y de forma más amplia contra la cultura islámica como enemigo de occidente, ahondando así en la teoría del “choque de civilizaciones” y fomentando el odio y el miedo, tan necesarios para mantener y fomentar la conflictividad, la violencia y las posturas extremistas. Por todo ello creemos que es necesaria la divulgación de proyectos como Al-Hamama que contribuyan a profundizar las reflexiones sobre los acontecimientos del 11-M en particular y sobre las relaciones oriente-occidente en general, contribuyendo a ampliar el ángulo de visión que los seres humanos establecen sobre la realidad. Con esta motivación nos dirigimos a su medio para que puedan conocer y dar a conocer este documental a través de sus informaciones.

Al-Hamama está resultando de gran interés en todos aquellos lugares donde ya se ha exhibido y no dudamos que del mismo modo será del interés también del público de su medio. Pueden tener más información y acceder a la descarga del documental completo en http://www.al-hamama.net

Idea original y dirección: Zouhair El-Hairan
Codirección: Isaac Lupiáñez y Óscar Vega
Imagen: Óscar Vega
Sonido: Isaac Lupiáñez
Montaje: Lluna Antúnez (Alea D and F)
Producción: Montse Martí (UPF)

Rebelión

11-M: EL DELITO ES "SER", NO "HACER"

Entrevista a Endika Zulueta, abogado defensor de Rabei Osmán, el Egipcio, y del minero Raúl González

“En el juicio del 11-M se solicitan condenas no por hacer algo, sino por ser algo”

Iñigo Aldabaldetreku/eutsi.org

Endika Zulueta (Donostia, 1963). Lleva 20 años viviendo en Madrid donde trabaja como abogado. Desde siempre ha estado comprometido con los movimientos sociales, ha llevado muchísimos casos de insumisión, okupación, detenciones ilegales y represión. También ha sido miembro de la Comisión Internacional de Abogados para el seguimiento de la Europol. Como abogado comprometido en la línea de la izquierda antiautoritaria ha desarrollado una gran labor en la preparación de innumerables juicios y declaraciones. En un sector como es el de los abogados de estas luchas, que casi siempre esta infravalorado, Endika Zulueta lleva años y años tratando de parar los pies a los abusos de la autoridad. En el juicio del 11-M ha sido un abogado muy significado por haber ejercido la defensa de acusados de las tramas asturiana y jihadista, la defensa del minero Raúl González y la de Rabei Osman, el Egipcio. Aprovechando que se ha dictado sentencia, es buen momento para hacer una valoración general y con cierta distancia del proceso y lo que éste ha supuesto. Por todo ello hemos invitado a Endika Zulueta a la página de Eutsi para hablar sobre el proceso del 11-M.

Entrevista realizada por Iñigo Aldabaldetreku

¿Qué te lleva a asumir las defensas de Rabei Osmán, el Egipcio, y del minero asturiano Raúl González?

Raúl González fue detenido en junio de 2004. Se le aplicó la legislación antiterrorista, no tenía derecho a designar abogado particular, y me correspondió su defensa por el turno de oficio. Soy su abogado desde el día que declara ante la Guardia Civil en Madrid hasta el final del proceso.

Rabei Osmán, que estaba preso en Milán desde junio de 2004, al igual que la gran mayoría de los imputados en este proceso, también tenía abogada del turno de oficio, pero ésta renunció a la defensa en octubre de 2006. Le fue nombrada otra Abogada de oficio, que también renunció a su defensa.

A finales de noviembre trajeron a Rabei Osmán a Madrid, pues se preveía que la vista oral iba a comenzar a mediados de febrero. Llegó un viernes y fue convocado para realizar una comparecencia el lunes porque la Fiscalía solicitó la prórroga de su prisión. Se encontraba sin defensa. Citaron a la primera Letrada a pesar de que ella ya se había apartado del asunto, como ella no podía acudir, acudí yo en sustitución. Hablé con Rabei apenas cinco minutos. Tras la comparecencia le preguntaron si tenía Letrado particular o debían nombrarle otro de oficio (con la posibilidad de nueva renuncia, parecía que nadie quería asumir su defensa, y que la vista se retrasase). De la Audiencia me llamaron para decirme que Rabei había solicitado que yo fuese su abogado. Yo podía aceptar o no dicha labor. Pedí unos días para meditarlo.

Al ser el abogado defensor de Raúl desde el principio he tenido acceso a la causa conforme se iba levantando el secreto de las actuaciones. La defensa de Rabei Osmán siempre me ha parecido una de las más interesantes por varias razones:

Rabei tenía intervenido su teléfono móvil, el teléfono fijo, todas las comunicaciones telemáticas (correo electrónico, chats, páginas webs visitadas…). Estaban asimismo intervenidas las cabinas telefónicas y los locutorios cercanos a su domicilio. La policía colocó cámaras de videovigilancia captando las 24 horas todas las personas que entraban y salían del domicilio y realizaban un seguimiento personal continuado cada vez que estaba en la calle.

Pero la prueba estrella que la Policía, y la Fiscalía, presentaba contra Rabei, eran unas grabaciones ambientales obtenidas tras la colocación de micrófonos ocultos dentro de su domicilio. El Juez de Milán había autorizado la grabación de conversaciones entre presentes en el domicilio de Rabei. Con esta autorización la policía colocó tres micrófonos en su domicilio: cocina, sala y dormitorio, grabando, durante meses, todas las conversaciones de todas las personas que pasaran por su domicilio (habitualmente vivían cuatro egipcios).

Rabei Osmán ha sido una de las personas más controladas por la policía en Europa en los últimos años, aplicándosele la más moderna tecnología de control, dentro de la legalidad. Ahora bien, el tema de la colocación de los micrófonos en el domicilio merece una especial atención. Tengo mis dudas de su legalidad en territorio italiano (pues el Juez autorizaba la interceptación de conversación entre presentes, pero no la entrada en el domicilio), pero siempre pensé que era importante defender la ilicitud de esta prueba dentro de la legislación española.

En lo que denominan lucha contra el terrorismo no vale todo, no debemos permitir que valga todo. En el ámbito internacional parece que hay más acuerdo en Europa en que no valen guerras preventivas, no valen Guantánamos…. Con la excusa de velar por nuestra seguridad se va creando una legislación, y una práctica, que va cercenando espacios de libertad a pasos agigantados. Las nuevas tecnologías se han puesto al servicio del control social. Intervenciones telefónicas, intervenciones telemáticas, videovigilancia, RFDI (chips en los documentos personales) y muchos etcéteras.

Y en ese contexto llega la pregunta: ¿ha de consentirse también que, con la excusa de la lucha contra el terrorismo, el Estado, a través de la policía, tenga licencia para entrar, nadie sabe bien cómo, a los domicilios de las personas que ellos consideren sospechosos para colocar micrófonos?.

Teníamos como antecedente que el Tribunal Supremo español había absuelto a otra persona que había sido condenada por una declaración obtenida en la base estadounidense de Guantánamo, al declarar dicha prueba ilícita. Rabei Osmán podía ser el autor del gravísimo delito que le imputaban, pero las pruebas debían ser obtenidas de otra manera. Así, desde esta perspectiva, consideraba que era importante, no solamente para el propio Rabei, sino para toda la sociedad, que se declarase ilícita esta forma de obtención de la prueba, de lo contrario se crearía un peligroso antecedente.

Pero había más motivos para asumir su defensa. Rabei Osmán había sido social y mediáticamente condenando mucho antes de comenzar la vista oral. Las famosas conversaciones habían sido hechas públicas por las autoridades italianas cuando todavía la causa se encontraba secreta en España. Defender la presunción de inocencia reconocida en el artículo 24 de la Constitución Española se convertía así en un acto cuasi revolucionario.

En el terreno personal y profesional, participar en el juicio más relevante celebrado en Europa desde el de Nuremberg defendiendo al que habían convertido en icono de los acusados, suponía todo un reto personal y profesional, al que un abogado penalista vocacional, como es mi caso, no podía negarse.

¿Cómo valoras el desarrollo del juicio sobre el 11-M?

Habría que diferenciar la instrucción de la causa de la vista oral. Los abogados defensores hemos denunciado que, durante la instrucción de la causa, se han vulnerado varios derechos fundamentales y había una alarmante desigualdad en la intervención de la Fiscalía y de las defensas. El secreto de la causa durante casi dos años (no fue levantado del todo hasta abril de 2006), suponía que no pudiéramos participar en diligencia alguna, una vez levantado el secreto no se admitió ninguna diligencia de prueba solicitada por las defensas. Ninguna. A ello había que añadir la dificultad de preparar el juicio con personas con una evidente diferencia cultural e idiomática, sin que se facilitasen intérpretes hasta avanzado el mes de octubre de 2006.

Los presos se encontraban todos incomunicados en un severo régimen de aislamiento que añadía mayores dificultades en preparar la defensa, tanto humana como técnicamente.

En la vista oral sin embargo, y de forma general, el Tribunal ha garantizado en mayor medida el ejercicio de la defensa y el igual trato entre acusaciones y defensas.

A mi juicio, uno de los aspectos más llamativos de la vista oral, fue el intento de aplicación del derecho penal de autor. La policía presentaba pruebas contra lo que han venido a denominar islamistas, intentando crear perfiles de criminales en base a un comportamiento no delictivo. Empezando por la propia denominación, islamistas = terroristas, por lo que implica de subliminal criminalización ante la conciencia social de una practica religiosa. Pues bien, al ver que no existían pruebas contundentes de la participación de los acusados en el gravísimo atentado (de hecho sólo han resultado dos de ellos condenados por su implicación en el mismo), la policía presentaba como indicios de criminalidad ciertas características personales, llevando a la Sala el derecho penal de autor (como paso previo al derecho penal de enemigo). Así, y con respecto a Rabei Osmán, se decía que era una persona “extremadamente religiosa”, que iba mucho a la Mezquita, que tenía una marca en la frente de mucho rezar…. A otros se les acusaba de reunirse, de pensar que había que hacer algo (el pensamiento no delinque), de hablar, de ver vídeos (sin siquiera acreditar su existencia), de visitar páginas tildadas de yijadistas (sin saber cuáles son ni porqué se las define así)… pero ningún acto delictivo. Es decir se solicitan condenas no por hacer algo, sino por ser algo. El derecho penal de autor es una característica de regímenes autoritarios. Mi abuelo estuvo en la cárcel por ser rojo (sin necesidad de que realizase actividad alguna), la ley de vagos y maleantes permitía que muchas personas fueran privadas de libertad por ser homosexuales, y así mil ejemplos.

Finalmente se llegó a afirmar en la vista que, si bien no había pruebas de su participación en los hechos, Rabei era “muy peligroso”, solicitando una sentencia condenatoria, si no por lo que había hecho (ya que no conseguían probarlo), por lo que podría hacer si es puesto en libertad, instando de ese modo una sentencia preventiva, del mismo modo que otros hacen guerras preventivas.

El siguiente paso sería la aplicación del derecho penal de enemigo. Si se identifica al acusado como terrorista, y al terrorista como enemigo, en un contexto de guerra al terrorismo, se traslada al ámbito jurídico un lenguaje de guerra en el que las garantías jurídicas comienzan a brillar por su ausencia.

¿Cómo fue la defensa del minero asturiano?

Creo que conseguí, a través de pruebas videográficas, fotográficas, documentales, testificales… acreditar que la vigilancia y el control de los explosivos en mina Conchita, labor responsabilidad tanto de la empresa minera como de la Guardia Civil, era prácticamente inexistente; ese contexto facilitó la sustracción de los explosivos. La condena de un trabajador de la mina evitaría que las miradas se centrasen en la actividad, o inactividad, tanto de la empresa como del cuerpo armado, creo que era obvio que el descontrol era de tal calibre que no hacía ninguna falta la colaboración de un trabajador para la sustracción. En este sentido entiendo que los mineros se han convertido en víctimas de la situación.

¿Qué tipo de presiones mediáticas y políticas se han ejercido en relación al juicio?

Todo el proceso ha estado rodeado de mucha presión política y mediática. Nunca en la historia de este país ha habido un debate político de tal envergadura ante un enjuiciamiento, al tiempo que entes empresariales masmediáticos estaban enfrentados haciendo un seguimiento de la vista oral con una intensidad desbordante.

La presión ha existido ante el enjuiciamiento en sí y, evidentemente, en mayor o menor medida, ante todas las personas que hemos tenido participación en el mismo. Correspondiéndome la defensa del que fue elegido icono de los acusados, he recibido esa presión. Ahora bien, creo que, en general, y por lo que respecta a los abogados de la defensa, hemos sabido mantenernos al margen de estas presiones, intentando al mismo tiempo que el saber que nuestra trabajo estaba siendo minuciosamente analizado desde tantos frentes provocara que lo hiciéramos, si cabe, con mayor pasión y profesionalidad.

Tras dictar sentencia el tribunal, ¿en qué punto está el proceso respecto a tus defendidos Raúl González y Rabei Osman?

A Raúl González le han condenado a cinco años, aunque el tribunal ha estimado que puede quedar en libertad provisional hasta que el tribunal supremo dicte la sentencia definitiva (el ya ha estado casi dos años preso por esta causa). De todos modos, no ingresará en la cárcel por haber cumplido dos años de prisión preventiva. Rabei Osman, al haber sido absuelto, se encuentra en libertad por esta causa (esta preso preventivo en Italia). Algunas acusaciones han presentado recursos de casación solicitando nuevamente su condena.

Y, ¿qué expectativas tienes en relación a tu defensa de Rabei Osman ante el recurso presentado por la fiscalía?

Durante la vista oral, la fiscalía acusaba a 29 personas, habiendo transformado a Rabei Osman en icono de los acusados tras la creación del personaje denominado “el Egipcio”. Ahora han anunciado que van a formular recurso únicamente contra su absolución, y entiendo que pondrán toda la carne en el asador. Para mí, como defensor suyo, esto supone mayor reto y confío en que sea nuevamente absuelto por el Tribunal Supremo.

Tras dictarse la sentencia se decía que la absolución de Rabei había sido una de las sorpresas. Ésta consideración me parece altamente preocupante. Algo falla en el sistema cuando el hecho de que se absuelva a una persona contra la que no hay pruebas de su vinculación con un hecho delictivo se convierte en algo sorpresivo. Algo falla cuando lo normal se convierte en excepcional.

¿Qué conclusión sacas de tu experiencia en el proceso de 11-M?

Siempre he pensado que cuando creemos firmemente en lo que estamos haciendo, y aquí me refiero a cualquier actividad que desarrollamos en la vida, no debemos tirar la toalla por más dificultades que encontremos en nuestro camino, máxime cuando se trata al cuestionamiento de derechos fundamentales que tantos años y sufrimiento ha costado arrancar. Pocas personas lo tenían tan difícil como Rabei Osmán cuando comenzó su proceso. Nadie daba un duro por su defensa. Y hemos resistido ataques provenientes de todos los frentes. Entiendo que su absolución es un aliciente para todos, ha ganado la presunción de inocencia. la prueba de que a veces David también puede a Goliat.

Para más información: VídeoInforme de conclusiones definitivas del Abogado Defensor de Rabei Osman El Sayed ‘El Egipcio’: www.datadiar.tv/juicio11m/resumen150207.htm

11-M: LOS ENCUBRIDORES DICTARON SENTENCIA

Se ha escenificado un acto más de una sórdida representación. Una representación que comenzó minutos después del estallido de varias bombas en Madrid el 11 de marzo de 2004 y que aún no ha finalizado.

Por: Colectivo Dek Unu

Somos todos iguales ante la ley.
¿Ante qué ley? ¿Ante la ley divina?
Ante la ley terrena, la igualdad se desiguala todo el tiempo y en todas partes,
porque el poder tiene la costumbre de sentarse
encima de uno de los platillos de la balanza de la justicia.

“Patas arriba. La escuela del mundo al revés” (Eduardo Galeano)

Se ha escenificado un acto más de una sórdida representación. Una representación que comenzó minutos después del estallido de varias bombas en Madrid el 11 de marzo de 2004 y que aún no ha finalizado. Los intentos del Estado por construir y ofrecer una explicación verosímil –versión que achaca la autoría a personas que pensamos que no tuvieron ninguna relación con la masacre- han culminado en la “sentencia” hecha pública el pasado 31 de octubre por la sección segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional española. Lo que veníamos indicando parece ratificarse, y ahora podemos decir que cualquier análisis debería conducir a un mismo punto: las conclusiones del “tribunal” no reúnen unas condiciones mínimamente válidas y racionales para explicar los hechos juzgados.


Tal como esperábamos –y así lo anunciamos en un documento anterior- los miembros del “tribunal” han seguido la estela marcada por otros aparatos del Estado y han condenado a buena parte de los procesados. Para ello han contado con la inestimable y entusiasta colaboración de la práctica totalidad del entramado político y mediático español, cuyas contradicciones internas se han manifestado a lo largo de estos años en divergencias que no hacían cuestionar lo más importante: que estábamos ante una gran operación de encubrimiento que se puso en marcha el mismo día 11. Es necesario repetir que la participación de sectores vinculados al PP en el falso debate que se creó tras el 14 de marzo sólo ha provocado distorsión. Una distorsión generadora de hastío y que ha hecho que muchas personas eviten entrar a considerar cualquier aspecto de este caso. Para nosotr@s las alusiones de unos y otros a ETA y a Al Qaeda han sido cortinas de humo colocadas en un escenario político en el que nadie quiere conocer -o dar a conocer- la verdad.


En ningún instante hemos tenido dudas al respecto: los asesinos del 11-M no han sido ni serán capturados por las “fuerzas de seguridad”. Los familiares de las personas muertas y heridas y las asociaciones que las representan han sido vilmente utilizadas. Además, varias personas murieron en circunstancias no aclaradas y sobre sus cadáveres se construyó una grotesca versión oficial. La lluvia incesante de mentiras ha calado en la sociedad y los dos ejes sobre los que gira el sistema político español, PP y PSOE, sin temor a la quiebra del que llaman “Estado de derecho”, continúan en su búsqueda de réditos electorales. Y la vida, la farsa, continúa.


UNA SENTENCIA CON PIES DE BARRO

Sin embargo, y como era previsible, la acumulación de maniobras y patrañas sólo podía generar una “sentencia” insólita por vaga y contradictoria. Hay que decir que no puede hacerse una valoración rigurosa del caso si nos ceñimos sólo a un documento por otro lado pésimamente escrito, puesto que éste es el último tramo de un recorrido que parte el día de la matanza. De hecho, si nos basamos en ese texto para explicarnos el 11 de marzo de 2004 sólo llegaremos a la conclusión de que no es posible formular una reconstrucción coherente de lo sucedido. La sentencia quiere ser precisa señalando los nombres de las personas que presuntamente participaron en la masacre, a pesar de que la mayoría no fueron interrogadas ni juzgadas. Sin embargo, al mismo tiempo es difusa en otros muchos aspectos: características de los explosivos, planeamiento de la masacre, identificación de la organización ejecutora y de su motivación, etc. En otras palabras: aunque pueda parecer increíble, con la “información” usada para condenar a 21 personas y culpar “post-mortem” a otras no se ha sido capaz de despejar los aspectos claves del caso. Pero los acontecimientos empiezan a cobrar sentido en cuanto dirigimos nuestra mirada al sumario y se modifica en la ecuación una variable que habitualmente se da por supuesta: la de la validez de las “pruebas”.

No estamos hablando únicamente de irregularidades en la cadena de custodia. Hay que ir mucho más allá. Sucede que no estamos ante hechos de delincuencia común, que no existen testigos identificados que acusen directamente de la masacre a los procesados y que todos éstos han condenado los crímenes y defendido con uñas y dientes su inocencia en todo momento –incluso cuando estuvieron incomunicados y a merced de la policía- a pesar de su presunta militancia islamista voluntaria. Curiosamente, nadie ha hablado de un posible arrepentimiento. Alguien debió pensar que muchos se preguntarían por qué personas ajenas por completo al yihadismo, al islamismo e incluso al Islam eran condenadas por cometer una compleja operación supuestamente salafista. Ante este inevitable y desalentador panorama los encubridores tuvieron que adjudicar a los procesados una identidad religiosa y política ajena a ellos y modelaron unas pruebas que debían encajar en la versión oficial que se fabricó al efecto.


Quien acostumbre a confiar en el intachable trabajo de policías e investigadores quizás quiera ver la irrefutable validez empírica de las “pruebas” por más que éstas no sean compatibles con otros elementos del caso. Pero la confianza ciega es muy peligrosa. Si a cualquiera de nosotr@s deciden acusarnos de un delito que no hemos cometido y nos presentan pruebas tales como que “un testigo protegido” nos vio en la zona de los hechos o que tienen “pruebas conjeturables” (sic) nuestra presunción de inocencia quedará demolida y la indefensión será absoluta. En la sentencia se dice que los testigos protegidos “R-10, C-65 y J-70” vieron a Zougam. Pero los supuestos testigos protegidos se limitan a decir que vieron a alguien en los trenes que después identificaron con los rasgos de Zougam. No importa que el aludido y otros declarantes en el juicio lo desmientan una y otra vez: esta es una “prueba” para condenar a una persona a más de 40.000 años de cárcel. Sin comentarios.


Hay quien cree que el sistema judicial español es garantista y que no hay razones que justifiquen semejantes aberraciones, pero nosotros seguimos afirmando que en este caso concreto ha ocurrido lo que pocos querían imaginar. Algo muy grave se vislumbró aquella mañana y ante las explosivas repercusiones que habría generado contar la verdad se decidió imponer la razón de Estado. No olvidemos que se ha tratado de una situación excepcional ante la que las instituciones han reaccionado de forma extraordinaria (lo cual obviamente no quiere decir que el sistema judicial español haya actuado con arbitrariedad sólo esta vez).


Y no se trata de que la sentencia tenga puntos oscuros o que falten sólo los nombres de los “autores intelectuales”. Es cierto que ninguno de los presuntos “autores intelectuales” (un concepto puesto ahora en solfa por quienes no cuestionaron su presencia en el juicio en ningún instante) ha sido condenado por ello. Pero quien crea que sólo falta conocer quién es la X que está en la cúspide de la pirámide comete el gravísimo error de no cuestionar la construcción que los “juzgadores” nos han presentado. La lista de ejemplos es interminable y es imposible incluir todos en un documento que no quiere ser excesivamente largo. Algún botón de muestra sería incluso hilarante si no fuera por la extrema gravedad del caso y por el papel determinante que en este guión cumplen los sucesos de Leganés:


Se habla repetidamente en la sentencia de los “suicidas de Leganés”. Incluso si diésemos por buena la para nosotr@s ridícula versión oficial, ¿en qué se basan los jueces para dar por supuesto que todas y cada una de las personas que se dice que murieron allí decidieron suicidarse? ¿Por qué otorgan validez a un “informe” que de unos cadáveres destrozados concluye que en todos los casos la muerte responde a una “etiología violenta de carácter suicida” (sic)? ¿Qué extraños poderes han operado para detectar el “carácter suicida” de los efectos de un explosivo? Es inquietante saber que a partir de ahora, si alguien adosa un artefacto a una persona para más tarde hacerlo estallar, los jueces sancionarán que la etiología de la muerte ha sido “de carácter suicida”. Y lo mismo ocurrirá si a alguien le explota antes de tiempo un artefacto mientras lo manipula o transporta. Ni siquiera merece la pena hablar de los apaños para afirmar la “compatibilidad” entre el uso de inhibidores de frecuencias y las supuestas “llamadas de despedida de los suicidas”. Y más allá de todo esto, ¿por qué se juzga constantemente en esta sentencia a quienes no han sido procesados ni tienen ya posibilidad alguna de defenderse? ¿No será que con la repetida alusión al “suicidio” se pretendían sortear algunas contradicciones del guión y dar por supuesta la culpabilidad de unos presuntos activistas fanáticos? La sentencia esquiva los aspectos reseñados y acusa a quienes cuestionan los hechos de Leganés de pensar que lo que ocurrió allí fue “obra de una mano desconocida que, como parte de un plan maquiavélico más amplio, ideó y ejecutó los atentados del 11 de marzo”. Lo que nosotr@s decimos ante estas y otras gratuitas afirmaciones es que, como bien saben los “juzgadores”, cuestionar los hechos de Leganés evidentemente no significa acusar de los atentados a quienes prepararon esa operación. Para nosotr@s, por ejemplo, el operativo de Leganés fue simplemente una acción fundamental para vertebrar la maniobra de encubrimiento e imprescindible para abrir el camino al desenlace judicial del caso.

Estamos segur@s de que los “jueces” conocían la insostenibilidad de las indagaciones y pruebas presentadas por las FCSE en el caso del 11-M, aunque en cualquier caso debían ajustarse a ellas a la hora de redactar su veredicto. Sin embargo, queremos llamar la atención sobre un hecho muy llamativo: el Tribunal, consciente de que los problemas derivados del sumario tenían su origen en una investigación completamente irregular, quería evitar que en un futuro se produjeran acusaciones de prevaricación. Así lo manifiestan la especial insistencia de los jueces en subrayar su dependencia del sumario, la alusión en la primera página de los fundamentos jurídicos de la sentencia a que “son también pruebas válidas las indiciarias, indirectas o conjeturables” y el filtro que han aplicado a muchos datos clave que figuraban en él.

Este filtro en ocasiones ha desfigurado en la sentencia las conclusiones del juez instructor. Entre otras muchas cosas, desaparece la identificación de la organización responsable de los atentados. Tanto han intentado curarse en salud que las innumerables detenciones practicadas concluyen en dos únicas condenas por una “autoría” de la que se ha retirado conscientemente el adjetivo de “material” (por cierto, no sé entiende por qué no se han tomado medidas por colaborar con el terrorismo contra todas las personas que testificaron en el juicio y que se involucraron personalmente en las coartadas de los procesados). Además, del texto de la sentencia se deduce una manifiesta voluntad de que las diferentes facciones políticas, parcialmente enfrentadas entre sí, pudieran sentirse tan satisfechas como contrariadas por el veredicto. Y es que en esta ocasión la facción judicial del poder no trataba de tomar partido por uno u otro partido o grupo mediático; su función institucional se centraba en contribuir a afianzar la estabilidad del sistema en su totalidad, aunque eso supusiera burlarse de la justicia.


¿Y ENTONCES QUÉ PASÓ?

Desde el principio hemos manifestado nuestra convicción de que la masacre del 11 de marzo de 2004 no fue perpetrada por ETA ni por ninguna de las personas que han sido detenidas, acusadas y procesadas en los últimos años. También rechazamos las especulaciones de sectores ultraderechistas que apuntan a la participación de supuestos enemigos del gobierno del PP. Tenemos cada vez más razones para pensar así y ni una sola en contra. Los últimos meses han apartado varios elementos más en este sentido.

Hemos podido asistir a un “juicio” que ha recibido una atención mediática sin precedentes, pero aunque no hubiera sido así, el escenario de la vista oral habría servido igualmente como inmejorable altavoz para difundir el mensaje de unos activistas responsables de un acto de enormes dimensiones sociales y políticas. Sin embargo, lo que ha ocurrido es que ninguno de los procesados ha asumido, apoyado, defendido o justificado ni los atentados ni la forma de pensar que apriorísticamente se ha adjudicado a los autores. Es más, su actitud hacia la matanza ha sido siempre de absoluto rechazo (¿estamos ante unos extraños terroristas que deciden pisotear en el juicio el efecto potencial de sus acciones?) Tampoco han señalado a otras personas u organizaciones y no han rechazado la legitimidad del “tribunal”. Intentar justificar esta actitud diciendo que “son islamistas y por tanto actúan de una forma a la que no estamos acostumbrados” sólo produce vergüenza ajena. Que decenas de personas que apenas se conocen entre sí (de hecho, la sentencia no ha podido demostrar la conexión entre todas ellas) actúen como lo haría cualquier inocente no quiere decir que lo sean necesariamente, pero además de lo dicho no debemos olvidar dos cosas: a) la presunción de inocencia, derecho que en esta ocasión ha sido vulnerado desde el principio no por medio de “pruebas” sino a través de alusiones a la procedencia, personalidad o supuestas convicciones religiosas de los procesados, y b) que el delito que se juzga no es el robo de una cartera por parte de un ratero que al ser atrapado niega su responsabilidad, sino impresionantes masacres coordinadas -una por cada bomba que estalló y produjo víctimas- que supuestamente tuvieron importantes motivaciones políticas y/o religiosas que han brillado por su ausencia a lo largo de todo el proceso.


Quien haya seguido de cerca todo lo relativo a estos atentados sabe que las personas condenadas no sólo no pueden catalogarse como militantes islamistas, sino que ni siquiera practican el Islam. La “célula islamista yihadista” sólo existe en los folios de la “sentencia”. Pero también rechazamos con contundencia la afirmación de que los atentados fueran obra de quienes se dice que murieron en Leganés (de quienes podemos decir lo mismo que de los procesados) o de verdaderos “islamistas radicales” que ocultan su identidad.


El trabajo de encontrar a los culpables no nos atañe puesto que ese debería ser el cometido de las FCSE y de los jueces. Sin embargo, aunque lo que estamos denunciando debería ser suficiente para abrir otra línea de investigación, no nos hemos conformado con ello. La razón es que hay personas que, aun aceptando las contradicciones del caso, creen que al menos parte de los procesados han sido de responsables de alguna manera. El argumento que más se estila es: “algo habrán tenido que ver, porque si no, ¿quién pudo ser?” Creemos que no es necesario insistir en la puerilidad de tal razonamiento, que en este caso hunde sus raíces en el fango del racismo, el clasismo y la islamofobia. No nos cansaremos de repetir que todo apunta a que estas personas fueron elegidas como chivos expiatorios porque los manipuladores pensaban –en algunos casos por haberlos usado como confidentes- que tenían un perfil idóneo para que la ciudadanía los percibiera como personajes no deseables y merecedores de desconfianza: escasos recursos económicos, procedencia en muchos casos de países árabes (la sentencia llega a usar el concepto científicamente absurdo de ‘raza árabe’), escaso arraigo en la sociedad de acogida (incluso en la comunidad musulmana), algunos antecedentes penales por delitos comunes, relación con la mina elegida como falso origen de los explosivos… En definitiva, seres que comparten pocas características con la clase media española; tan pocas que se les podía denigrar sin piedad y acusarles de haber perpetrado cualquier felonía incluso aunque ésta careciera de sentido. La situación llegó a un punto que considerábamos vergonzante y ridículo: la presunción de inocencia de los procesados estaba siendo condicionada por la ausencia de una hipótesis alternativa. Con todo, decidimos superar también esa trampa y difundimos una versión de lo que pudo haber pasado que hoy seguimos sosteniendo con tanta firmeza como el primer día.


Desde el primer momento, y al igual que han hecho otros colectivos y personas, hemos identificado la masacre como un operativo ejecutado por servicios especiales y vinculado directa o indirectamente al ejercicio antiterrorista de la OTAN identificado como “CMX 2004”, realizado en Madrid y en otras capitales entre el 3 y el 10 de marzo de aquel año. La operación habría tenido como principal objetivo recrear una fantasmagórica “amenaza islamista” sobre Europa y reforzar la estrategia basada en la “guerra contra el terrorismo internacional”. El anuncio de celebración de aquel ejercicio se difundió públicamente pocas semanas antes de su ejecución, pero hoy sabemos que la OTAN comunicó la fecha a nivel interno al menos desde noviembre de 2003. Así lo han manifestado agentes que participaron en él. Creemos que el ejercicio oficial (la simulación de la situación generada por un virtual atentado que provocaba 200 muertos en Europa) pudo facilitar la cobertura necesaria para el ejercicio clandestino (el atentado real en Madrid). En documentos anteriores hemos intentado resolver las contradicciones aparentes que podría generar esta versión (sobre todo en relación a la gestión de la crisis por parte del PP y a los resultados de las elecciones del 14-M).

Pero ahora lo que deseamos resaltar es algo que ha sucedido desde el 11-M y el 7-J de Londres: el encubrimiento de lo ocurrido y la intensificación de medidas de control y represivas contra la población sugieren que los autores del operativo se salieron con la suya. Un ejemplo más de ello es el reciente anuncio de que el Ministerio del Interior español podrá movilizar al ejército ante el riesgo de “amenaza terrorista”, un concepto usado de forma tan elástica que sirve para justificar cualquier medida. De todos es sabido que en otros Estados se han ido tomando medidas similares. Tampoco debemos olvidar que la labor de las instituciones españolas en este caso –y en el apoyo a las ocupaciones de diferentes pueblos- ha sido tomada muy en consideración e incluso ha permitido que un militar español aspire por primera vez a dirigir el brazo militar de la OTAN.


EL PAPEL DE LOS MEDIOS

Hemos comenzado este texto con una cita de Eduardo Galeano. El escritor uruguayo también dijo alguna vez que la industria del consuelo vive del mercado de la angustia, la industria de la seguridad vive del mercado del miedo y la industria de la mentira vive del mercado de la estupidez. Nosotr@s pensamos que quien se haya enfrentado a este caso con un mínimo de honestidad y sin lastres de ningún tipo sale rápidamente de la influencia del último de los mercados, aunque la angustia y el miedo puedan acrecentársele por ello. No queremos con esto exculpar a nadie, pero ciertamente el engaño masivo no habría podido sostenerse si no se hubiera dado la participación activa en unos casos, y la desidia en otros, de la mayor parte de agencias y empresas del mundo de la comunicación. Los medios han sido claves para el enterramiento de la verdad, y su rol intoxicador se ha acentuado durante y después de la celebración del juicio. Cadenas de televisión, emisoras de radio, prensa escrita y digital… prácticamente todos los medios convencionales han colaborado de forma activa o pasiva en provocar la situación a la que hemos llegado. No podemos hacer grandes distinciones entre los medios próximos a cada una de las estructuras políticas del sistema bipartidista. En esta cuestión “Público” no está siendo menos intoxicador que “ABC”, y “El Mundo” no menos que “El País”.

En todo caso, salta a la vista que el grupo PRISA, que hasta ahora ha sido la punta de lanza mediática del partido que detenta la titularidad del gobierno, ha sido uno de los más disciplinados valedores de la teoría conspirativa islamista que debía conducir a la “sentencia” emitida en octubre. Que nadie albergue dudas: lo han hecho sin escrúpulos y con plena conciencia. Durante los últimos meses, y ante el cariz que estaba tomando el juicio principalmente por la actitud de los procesados y por el excelente trabajo realizado por abogados de oficio, este grupo de medios se ha visto obligado a intensificar su rol intoxicador.Un ejemplo de ello es la acumulación de noticias relacionadas con el “terrorismo islamista” en las semanas previas a la publicación de la sentencia. La víspera de la lectura del fallo, la Cadena SER quiso preparar a sus oyentes para la sentencia afirmando en su informativo de las 20:00 que según informes de los servicios de información “la mayor parte de las mezquitas de España son centros de formación de terroristas”. Pero la intoxicación y las calumnias no cesaron tras la publicación de lo que llaman “verdad judicial”. De hecho, tres días más tarde, esa misma cadena tuvo que salir al paso de las controversias causadas por una sentencia que eludía explicar el motivo de los atentados y su planificación. Así, dijeron que “el Tribunal no tiene por qué contestar a preguntas que no se le han planteado”. Pero acto seguido señalaron que “los jueces (…) sí justifican el por qué ocurrió. Dicen que el atentado obedece a la estrategia de la Yihad internacional que pretende derrocar los regímenes democráticos y sustituirlos por un Estado islámico. Y ese es el mensaje que lanza Al Qaeda en todos sus comunicados a partir de la invasión de Iraq, y en concreto su líder Bin Laden cuando habla entre otras cosas de recuperar Al Andalus para los musulmanes”.

Cualquier persona que haya seguido el juicio deberá hacer desgarradores esfuerzos para imaginar a cualquiera de los procesados en relación con Bin Laden, las estrategias de la “Yihad internacional” (sea esto lo que sea) y la imposición de “Estados islámicos”. Es curioso que los “jueces” y estos medios coincidan también en este punto. ¿No se había quedado en que la causa era responder a la invasión de Iraq? ¡Ahora resulta que con el 11-M se quería “recuperar” Al Andalus e implantar un Estado islámico en la península! Pero lo que queremos destacar aquí es otro significativo hecho: algunos medios se han visto en la tesitura de intentar poner parches a un texto, el de la sentencia, que en principio no debería precisar apuntalamiento alguno. Lo que ocurre es que estamos ante un frágil castillo de naipes que no podrá ser derribado mientras esté protegido por una gruesa cápsula de impunidad.

Parece que pocos han reparado en otra significativa y flagrante contradicción en la que han caído estos medios. Aunque nos dijeron más de una vez que era normal que quedasen “flecos sueltos” (sic) y que en realidad aún restan por celebrarse varios juicios más en relación con el 11-M (lo cual es absolutamente cierto), la reacción ante esta primera “sentencia” ha sido la de titular –como ha hecho El País-: “11-M, caso cerrado”. Repetimos que el caso del 11-M no está cerrado ni siquiera en su vertiente judicial –sin olvidar los recursos que sin duda las defensas de los condenados presentarán contra esta “sentencia”-, pero parece que algunos no querían limitarse a una información peligrosamente aséptica y su sobreactuación les ha llevado a gritar “caso cerrado” aún a costa de hacer el ridículo. Estas y otras expresiones refuerzan otra vez nuestra apreciación de que la manipulación de este caso buscaba un abrupto y falso final, sin posibilidad de dar marcha atrás.


Finalmente, no podemos pasar por alto la actitud de la prensa ante la huelga de hambre iniciada por buena parte de las personas condenadas. Casi todos los medios han intentado silenciar esta medida de protesta, y cuando les ha resultado ineludible referirse a ella lo han hecho ocultando sus razones y transmitiendo las nuevas mentiras de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias: estos presos no iniciaron la huelga por considerar “desproporcionadas” sus condenas, como ha dicho con desfachatez la DGIP, sino porque siguen declarando su completa inocencia y no ven otro recurso para defenderse. A nadie puede extrañar que una DGIP bien entrenada hasta hoy en la violación de los derechos de presos sociales y políticos aplaste también los de unos personas condenadas por conveniencia y empujadas en algún caso a la huelga de hambre o al suicidio.


LA LUCHA NO PUEDE DETENERSE

Tenemos la seguridad de que condenar a 21 inocentes no ha perturbado el sueño a esos instrumentos del Estado que sin ningún rubor dicen aplicar justicia, ni a los policías que fabricaron “pruebas” a destajo. Esta vergonzosa “sentencia” tampoco agitará el ánimo de las decenas de intoxicadores que sin ningún escrúpulo han usado prensa escrita, radio y televisión para ocultar la autoría de la masacre y destruir la vida de personas que no tuvieron nada que ver con ella. Podríamos citar uno por uno, con sus nombres y apellidos, a todos esos individuos que de una forma u otra han sido colaboradores necesarios en esta nauseabunda infamia. La lista sería muy larga, y todos ellos confían en que sus actos, verdaderos delitos de prevaricación, calumnias, injurias y falso testimonio (entre otros muchos), nunca serán juzgados. Pero el hedor emanado por su actuación y por el funcionamiento criminal de unas instituciones corruptas no desaparecerá fácilmente.

Como sabemos, nada de esto es nuevo. El Estado precisa de vez en cuando sacrificar la vida y la libertad de algunas personas para perpetuarse. Tenemos múltiples ejemplos de ello tanto en el pasado como en la actualidad. Si diferentes gobiernos han ejecutado impunemente decenas de crímenes de forma directa o usando seudónimos como BVE, Triple A o GAL, creerán con razón que no ha de resultar menos arduo encubrir las matanzas de los aliados (con los que comparten objetivos estratégicos), aunque los crímenes se produzcan en su propio territorio y afecten a sus “súbditos” (mujeres y hombres que en su inmensa mayoría pertenecían a la clase trabajadora). Al igual que en ocasiones anteriores, no han encontrado obstáculos insuperables, entre otras cosas porque un sector mayoritario de la opinión pública sigue ajeno a la realidad y ciego ante las maniobras de las estructuras más poderosas del mundo, de las organizaciones político-militares a las que pertenece el Estado español, de los representantes políticos en general y de buena parte de los medios. Tampoco podemos ignorar el respeto irracional que aún despiertan en muchas personas las instituciones públicas, los delincuentes con uniforme o toga y el uso del lenguaje jurídico como camuflaje. Especialmente ignominiosa es la actitud de aquellos partidos que participan en las instituciones y se presentan como de “izquierda”. Desde el primer momento han querido mirar para otro lado. La política del avestruz pudo deberse en parte a una inexplicable ignorancia, pero pensamos más bien que creían que remover este asunto podía perjudicar sus mezquinos intereses y desestabilizar el Estado que les daba sustento. No ha sido esta la actitud de personas, colectivos y organizaciones revolucionarias que no han caído en esta formidable trampa y han difundido un mensaje alternativo contra viento y marea.

Nos consta, porque lo hemos vivido, que difundir esta visión supone recibir no pocos apoyos, pero también insultos y amenazas. Pero era una tarea insoslayable. Por lo que a nosotr@s respecta, nuestros quehaceres habituales eran y son otros y jamás llegamos a imaginar que durante un tiempo nos involucraríamos en un asunto de estas dimensiones. Esta era también una batalla contra el olvido como mecanismo de reproducción ideológica que asegura la continuidad del sistema. Ahora podemos decir que pase lo que pase merece la pena y es necesario seguir en este y en otros frentes, pero consideramos que a partir de ahora el trabajo requiere nuevas formas y estrategias. Las personas que hemos formado parte de este colectivo reiteramos que el 11-M y todo lo que le ha rodeado no son sucesos aislados que puedan analizarse de forma autónoma. Se inscriben en un modelo político y económico de organizar la sociedad que mientras persista producirá y permitirá que se produzcan todo tipo de injusticias, sufrimiento y crímenes a lo largo y ancho del planeta.


No podemos dar por supuesto que unos seres humanos sigan sometiendo a otros muchos. No es un hecho natural y es nuestro deber rebelarnos. La clase trabajadora y los sectores populares en general tienen que percatarse de que lo único que ha quedado demostrado con el falso desenlace de esta cruel mascarada es que la resistencia y la lucha colectiva contra la gigantesca maquinaria del capitalismo y del imperialismo no pueden llevarse a cabo solamente con palabras de denuncia. Este caso paradigmático permanece y probablemente permanecerá abierto durante mucho tiempo, pero ahora finaliza una fase y comienza otra: nosotr@s actuaremos en consecuencia.


Por último, no podemos terminar este comunicado sin recordar a Carlos, joven compañero antifascista vilmente asesinado por luchar contra el racismo y defender a la clase trabajadora. La mano negra del fascismo ha vuelto a golpear en Madrid y ante ello no cabe otra respuesta que fortalecer el trabajo, la organización y la unidad contra el enemigo común. Además de mostrar nuestra más sentida solidaridad a la familia y amig@s de Carlos y a todo el movimiento antifascista, llamamos a participar en las diferentes movilizaciones convocadas en protesta por este nuevo crimen, porque como bien se ha dicho el mejor homenaje es continuar la lucha.


Por Colectivo Dek Unu